Del Bridge City Militant, N° 3. An English translation is available here.
Ciudad de Nueva York: Se fundó
Trabajadores Internacionales Clasistas

“Ni ilegales, ni criminales, somos obreros internacionales”
Hay actualmente hasta 15 millones de trabajadores internacionales junto con nuestras familias que residimos en Estados Unidos sin tener los documentos que nos exigen los dueños del país. Carecemos de derechos democráticos fundamentales mientras realizamos trabajos duros y en muchos casos peligrosos, recibiendo una miseria como pago. Somos realmente, como escribió Karl Marx hace más de siglo y medio, esclavos asalariados.
Los trabajadores internacionales somos tratados como chivos expiatorios por todos los males que produce esta sociedad capitalista. Nos dicen “criminales” e “illegal aliens” cuando no hemos cometido ningún crimen. Se nos acusa de robar los empleos de trabajadores norteamericanos cuando hacemos faenas que nadie más quiere hacer. Nos acusan de abusar de los programas sociales cuando no somos elegibles para ninguno de ellos. De hecho, los trabajadores indocumentados pagan hasta 50 mil millones de dólares al año al Seguro Social, del cual no vamos a recibir ni un centavo.
Es más, muchos de nosotros fuimos obligados a emigrar porque nuestro propio sustento fue destruido por los tratados de libre comercio y las cruentas guerras desencadenadas por EE.UU. que han acechado nuestros países. Pero no somos mereamente víctimas. Grandes sectores de la economía norteamericana dependen de la mano de obra de los migrantes. Formamos parte íntegra de la clase obrera de este país. ¡Tenemos la fuerza para ser los protagonistas de nuestra propia liberación, y la de todos los oprimidos!
Varios de nosotras y nosotros ya hemos participado en importantes luchas sociales, de sindicalización, de solidaridad y en contra de todo tipo de injusticia. Hemos aprendido de nuestra propia experiencia, que lo que precisamos, y lo que debemos formar, es una dirección a la altura de las luchas que nos incumben, es decir, una dirección de lucha clasista.
Para hacer nuestro aporte a esta gran tarea, hemos decidido, trabajando en conjunto con el Grupo Internacionalista, formar Trabajadores Internacionales Clasistas sobre la base del siguiente programa:
¡Unión, fuerza, solidaridad! Jugar con reglas del patrón es segura perdición
En 2012, un grupo de valientes trabajadores de la panadería Hot and Crusty de Manhattan decidieron que no podían aguantar más la explotación despiadada y tomaron la decisión de sindicalizarse. Después de 55 días en la línea de piquete, ganaron. En 2015, cansados de salarios miserables y condiciones de trabajo peligrosas, cientos de trabajadores almacenistas de la tienda de materiales fotográficos B&H, inspirados por el ejemplo de Hot and Crusty, lanzaron su propia campaña de sindicalización logrando otro triunfo. Pero sabemos que toda victoria en la lucha de clases sólo es temporal mientras persiste el sistema de producción por la ganancia. ¡Sindicalizar a los no sindicalizados! La línea de piquete es la línea de clase – significa ¡No cruzar! ¡Luchamos por sindicatos combativos con dirección clasista! ¡Por la total independencia de los sindicatos frente al estado!
Los patrones nos tienen miedo, porque no tenemos miedo
En 1886, se estableció el Día Internacional de los Trabajadores, el Primero de Mayo, luego de una manifestación obrera que exigía la jornada laboral de 8 horas, y que sufrió un ataque policíaco que cobró varias vidas y llevó a la ejecución de los dirigentes obreros, los ocho mártires de Chicago. Hoy en día, 130 años más tarde, se suele imponer a los trabajadores inmigrantes indocumentados una jornada de 12 horas y una semana laboral de 48, 56 o hasta 72 horas semanales, por un salario de hambre. ¡No aguantamos más! En 2006 fue un paro de millones de trabajadores inmigrantes lo que reavivó el Primero de Mayo en EE.UU. Exigimos una reducción drástica de la jornada de trabajo y un enorme aumento salarial. Para las jornaleras y los jornaleros, sin ninguna estabilidad y seguridad de trabajo, luchamos por una sala sindical de contratación. Necesitamos seguro médico completo y atención médica, gratuita de alta calidad. En los lugares de trabajo luchamos por comités sindicales con el poder de parar la producción cuando hay condiciones inseguras.
¡Luchar, vencer, obreros al poder!
Sabemos que toda lucha de clase es una lucha política. En este año electoral de 2016, el candidato republicano azuza el odio racista en contra de mexicanos, árabes y musulmanes a la vez que hostiga a las mujeres. La candidata demócrata quiere lanzar nuevas guerras en Medio Oriente, y es responsable del golpe de estado de 2009 en Honduras. Los Trabajadores Internacionales Clasistas nos oponemos a todo partido o político capitalista. Los que no tenemos el derecho a votar llamamos a formar un partido obrero que luche por un gobierno obrero.
¡No rogamos, exigimos, plenos derechos de ciudadanía!
En su campaña electoral de 2008, el demócrata liberal Barack Obama prometió una “reforma migratoria”. Sin embargo, ocho años más tarde no hay nada. En su lugar, el gobierno de Obama ha deportado a unos 5 millones de inmigrantes. Las odiosas redadas siguen, hay decenas de miles de inmigrantes encarcelados en lo que son verdaderos campos de concentración. Llamamos a la movilización obrera e inmigrante en contra de los ataques racistas, a poner alto a las deportaciones, a cerrar los centros de detención y lograr plenos derechos de ciudadanía para todos los inmigrantes.
Liberación de la mujer: tarea de todos los trabajadores
El 8 de marzo es del Día Internacional de la Mujer, que conmemora la muerte de más de 100 trabajadoras inmigrantes en el incendio del taller de sudor Triangle Shirtwaist en Nueva York en 1911, que fue la chispa para la sindicalización de la industria costurera. Hoy las trabajadoras cumplen una doble jornada de trabajo, tanto en sus empleos como antes y después en la casa, donde se les impone la responsabilidad de hacer las tareas domésticas de la familia. Están constantemente acosadas por el hostigamiento sexual y un trato desigual. Se les niega hasta el control sobre sus propios cuerpos. Las y los Trabajadores Internacionales Clasistas exigimos: al salario igual, trabajo igual. En el mundo entero, reivindicamos el derecho al aborto libre y gratuito, a decisión exclusiva de la mujer. Exigimos guarderías gratuitas abiertas las 24 horas al día. Tal como el machismo, los prejuicios homofóbicos son un arma de la clase explotadora: es deber de todo trabajador consciente defender los derechos democráticos de gays, lesbianas, personas transgénero y todos los oprimidos.
Liberación de los negros, clave para la revolución obrera norteamericana
En este país, fundado sobre la esclavitud, la opresión de los negros ha sido fundamental para el dominio capitalista. Los inmigrantes estamos bien conscientes de cómo la clase dominante busca usarnos en contra de nuestras hermanas y hermanos afroamericanos. Ya hemos visto cómo a la par de los asesinatos policíacos de negros, todos los inmigrantes están en la mira de las fuerzas represivas. La policía es el brazo armado del capital, racista hasta la médula. Exigimos, ¡Policías fuera del movimiento sindical! ¡Contra los asesinatos racistas, movilización clasista! ¡La revolución es la única solución!
Asiáticos, latinos, negros y blancos, Obreros del mundo ¡uníos!
Desde tiempos de la Primera Internacional Obrera, los trabajadores de todos los países tenemos que unir nuestras fuerzas para ganar. ¡Defendemos a nuestros hermanos africanos, árabes, asiáticos en contra del odio racista! Del Medio Oriente a América Latina, ¡luchamos por la acción obrera para aplastar las guerras imperialistas! De China a Cuba, nos oponemos a los intentos de restablecer el dominio del capital.
Los trabajadores internacionales no tenemos nada que perder más que nuestras cadenas. ¡Tenemos un mundo que ganar!
Nueva York, 12 de agosto de 2016
Para más información sobre Trabajadores Internacionales Clasistas, llame a (212) 460-0983, o escriba a internationalistgroup@msn.com ■